El Comité de Convivencia del Centro de Formación Juvenil Valle del Lili resolvió en su última sesión actualizar el acuerdo de convivencia que rige las relaciones entre beneficiarios, con la familia, con los educadores y contribuye al proceso formativo de los adolescentes y jóvenes que se hallan allí por tener conflictos con la ley.
“Con el apoyo de Bienestar Familiar nos reunimos para tocar algunos temas relacionados con el acuerdo de convivencia y el comité de convivencia; venimos trabajando de acuerdo con los lineamientos y esto ha sido importante para nosotros, porque ha mejorado la coexistencia con nuestros pares, nos ha ayudado en lo personal, lo grupal, en la sección y a nivel institucional, se han hecho propuestas pedagógicas y nos ha permitido fortalecer el proyecto de vida y el proceso formativo”, señaló uno de los adolescentes integrantes del mismo.
“Algunos de quienes han participado han tenido la oportunidad de dar un paso adelante, mejorar la convivencia e iniciar una nueva vida”, agregó.
“Se tuvo una intervención con el ICBF con mesa pactada para trabajar el acuerdo y el comité de convivencia y salieron a relucir situaciones como deberes y derechos y la actualización; este comité está conformado por usuarios, funcionarios, familiares de beneficiaros del centro, con el ánimo de solucionar conflictos y situaciones internas con el fin de mitigar asuntos complejos que pueden presentarse”, señaló Diego Paz, coordinador pedagógico del Valle del lili.
El comité se reúne cada ocho días, buscando alternativas para mejorar la convivencia entre pares, entre formadores y pares, entre formadores y beneficiarios, resolver posibles conflictos y velando porque se pueda garantizar el mejor servicio, de vincular mucho más al Sena para nos apoye con las certificaciones de talleres, y la defensoría de familia”, continúo.